Airpods Pro, Apple introduce la cancelación de ruido

Nuevo diseño, resistentes al sudor y a las salpicaduras  y con cancelación de ruido. Así son los nuevos Airpods Pro, la última apuesta de Apple en su incursión en la industria del sonido. Y el que es el tercer modelo de sus ya famosos auriculares inalámbricos en los últimos dos años.

En su puesta de largo, Apple huyó por completo de las grandes presentaciones a las que nos tiene acostumbrados. Un síntoma de que, quizás, no nos encontramos ante uno de los productos estrella de la compañía (todavía). Pero sin olvidar que la la división de wereables de la firma ya es del tamaño de otras empresas del tamaño de Qualcomm, por ejemplo.

Un diseño centrado en la funcionalidad

El primer aspecto que destaca de estos Airpods Pro frente a sus predecesores es su diseño. Sin perder su esencia ni su tan popularidad identidad, Apple se desmarca del resto de los modelos con una línea que parece centrada de manera exclusiva en la funcionalidad.

La característica principal la encontramos en sus patillas, bastante más cortas de lo habitual. No obstante, la modificación más notoria se encuentra en su forma de auricular intra-auditivo, especialmente marcado gracias a la inclusión de almohadillas.

Máxima comodidad gracias a su asistente de configuración

Los fabricantes de este tipo de auriculares siempre han tenido que lidiar con lo relacionado con la manera en cómo ajustar este tipo de dispositivos a la forma del oído de sus usuarios.

Para solucionar esta cuestión, Apple ha incluido un pack de tres almohadillas, con el objetivo de que el usuario escoja aquella que le puede llegar a resultar más cómoda. No obstante, y con el fin de poder garantizar la elección, la firma americana ha creado su propio asistente que realiza un escáner del oído y propone la mejor opción para cada usuario.

De esta manera, la compañía de Cupertino logra maximizar la experiencia de usuario que acostumbra a ofrecer a todos sus clientes.

Adiós al sistema de toques

Una de las características mediante la que se definían los Airpods originales, tanto en su primera como en su segunda versión, era su característico sistema de toques. Mediante los cuales se podía pausar / reproducir la música, invocar a Siri o contestar una llamada.

Apple ha decidido que, como consecuencia del cambio estético de los Airpods Pro, el sistema de toques ha quedado desfasado. Ahora es necesario «pellizcar» para poder interactuar con ellos. Siendo una acción mucho más intuitiva y sencilla de interiorizar. Con una curva de aprendizaje mucho más rápida.

Una caja de carga renovada

La caja de carga ha sido redefinida por completo. Hasta adaptarse a las necesidades que requerían este nuevo tipo de dispositivos. A nivel estético, es bastante más ancha que su predecesora. No obstante, mantiene un peso bastante similar, permitiendo poder transportarla en el bolsillo sin dificultades.

En cuanto a su funcionalidad, también se ha incorporado la función de carga inalámbrica. Al igual que en los Airpods de segunda generación. Compatible con cualquier cargador que ofrezca carga inalámbrica Qi. A través de un indicador LED que se encuentra en la parte exterior, podemos conocer en todo momento el estado de la batería.

Apple lo apuesta todo a la cancelación de ruido

Todos los cambios mencionados anteriormente se justifican a partir de la incorporación de una funcionalidad clave: la cancelación de ruido. 

Para ello, Apple ha imprimido la máxima tecnología en su su última creación, a través de dos modos de control de ruido:

– Cancelación de ruido activa: Gracias a la presencia de un micrófono orientado hacia el exterior, los auriculares detectan los sonidos externos y los anulan emitiendo señales antirruido de igual amplitud para que anule ese sonido. Al mismo tiempo, el micrófono orientado hacia el interior comprueba si hay algún sonido no deseado y lo anula con otra señal antirruido. En total, la cancelación se ajusta 200 veces por segundo, con el objetivo de proporcionar la mejor experiencia a sus usuarios.

– Modo ambiente: El modo ambiente está especialmente pensado para aquellas situaciones en las que necesitamos estar pendientes de las señales acústicas del exterior. Como, por ejemplo, cuando estamos en un aeropuerto o esperando a un tren. En este modo se permite que el audio externo se escuche sin que por ello se vea mermada la calidad acústica del dispositivo.

Para alternar entre los diferentes modos de control de ruido, toda la gestión se puede realizar a través de los propios Airpods Pro, así como utilizando el iPhone, iPad, Apple Watch o, incluso, el Mac.