Así es el Amazfit Bip S, ¿se le puede pedir algo más?

Desde el nacimiento de los Amazfit Bip, son muchos los usuarios que se han visto especialmente atraídos por sus características. Entre ellas, su gran autonomía y la excelente relación calidad / precio que presentan. Muy por encima de cualquier otra posibilidad que podamos encontrar actualmente en la red.

Recientemente, se ha presentado en el mercado el Amazfit Bip S. Cuando pensábamos que este tipo de dispositivos no podían sorprender todavía más a su público, queda demostrado que nos equivocábamos por completo.

Una pantalla para ver durante todo el día

Uno de los grandes desafíos a los que, históricamente, se han tenido que enfrentar todos los smartwatches es a la visibilidad de su pantalla con incidencia directa del sol. La mayoría de los fabricantes han optado por incluir pantallas LCD. Éstas presentan una excelente iluminación bajo cualquier circunstancia, pero tienen un importante hándicap: su influencia en la autonomía. 

En este caso, nos encontramos ante una pantalla de 1,28 pulgadas. Está compuesta a partir de un panel TFT a color con una resolución de 176 x 176 píxeles. Al contrario de lo que ocurre con cualquier otro smartwatch, en este caso el panel siempre se encuentra activo. Por lo que es posible acceder a la visualización de la hora desde cualquier ángulo.

Además, también se ha protegido especialmente ante cualquier posible golpe al que pueda estar expuesto en nuestro día a día. Quedando cubierta con Gorilla Glass 3.

En conjunto, nos encontramos ante una pantalla que se ve excelente durante todo el día. Incluso cuando la luz solar incide de manera directa sobre ella. Una opción que destaca especialmente para llevar tanto durante el día a día como cuando realizamos cualquier deporte.

La práctica deportiva, su esencia

El Amazfit Bip S nos presenta diferentes funcionalidades a nivel deportivo que se consideran como suficientes para el grueso de la población. Entre los diferentes modos que propone, se encuentran algunos de los más populares: como correr, andar, la natación o la bicicleta elíptica. Además, también incluye un modo deportivo como «libre», para cubrir cualquier tipo de deporte que no esté predefinido con anterioridad.

Su GPS se conecta de una manera especialmente rápida. Al igual que ocurre con otros relojes especializados en el ámbito deportivo. Por lo tanto, permite hacer deporte sin depender del teléfono móvil.

En la pantalla podremos conocer la información básica de cada sesión. Kilómetros, ritmo o pulsaciones, entre otras. Además, podremos completar la información de una manera más precisa una vez se sincronice con nuestra aplicación móvil.

Configuración de las notificaciones

Las notificaciones son completamente personalizadas, pudiendo escoger entre aquellas que queremos que aparezcan en la pantalla. No obstante, es importante destacar que el reloj no deja interactuar con las mismas. Únicamente recibirlas, pero no responderlas.

Por lo tanto, su función es hacer de filtro para determinar por qué notificaciones merece la pena sacar el móvil del bolsillo, de aquellas en las que no resulta necesario. Un elemento que destaca especialmente a nivel de funcionalidad. Ofreciendo al usuario un importante ahorro de tiempo en el desarrollo de sus acciones cotidianas.

Una excelente autonomía

Si por algo destaca este Amazfit Bip S es por la excelente autonomía que ofrece al usuario. Con una capacidad de 200 mAh, promete hasta 40 días de autonomía en modo reloj.

Dependiendo de la configuración escogida, así como del uso del GPS, ésta puede disminuir considerablemente. No obstante, en cualquier caso se situará por encima de cualquier otra opción que exista actualmente en el mercado.

El Amazfit Bip S se presenta en el mercado como uno de los candidatos a convertirse en uno de los wereables del año. Se antoja difícil encontrar cualquier otro modelo que vaya a poder hacerle sombra durante los próximos meses.